Durante su segunda visita a Croacia, el Santo Padre Juan Pablo II además de Zagreb, Marija Bistrica y Split, visitó también Solin. El 4 de octubre de 1998 el Papa se encontró con los jóvenes en la Isla de la Virgen, el santuario mariano croata más antiguo.
A ese momento histórico, sin duda el más célebre de la historia de Solin desde los tiempos cuando la reina croata Jelena (Helena) caminaba por la Isla, acudieron unos cincuenta mil jóvenes que llegaron a la ciudad del río Jadro desde toda Croacia para escuchar el mensaje del Santo Padre: “¡Cuiden el tesoro de la fe que la historia les confió!”
El papa Juan Pablo II se dirigió a nosotros en croata, también en croata rezó el Padre nuestro y cantó junto con los jóvenes el salve: “Ave Virgen, Reina de los croatas”.
El mensaje de Juan Pablo II a los jóvenes
“Todavía me queda para decirles una última palabra, pero quizás sea la más importante. Está dirigida a ti, juventud querida. Se trata de una frase corta, pero muy importante. Aquí está: Jesucristo es “el camino, la verdad y la vida” (cf. Jn 14, 6). Él no defraudará a nadie y es el mejor amigo de la juventud. Permítanle que los alcance (cf. Flp 3, 12) para que puedan ser protagonistas de esa fascinante y gran aventura, unidos a través del amor hacia Dios y hacia el prójimo (cf. Mt 22, 33-40).
El futuro está en vuestras manos: vuestro futuro, pero también el futuro de la Iglesia y el de vuestra patria. Mañana tendrán que enfrentarse con grandes responsabilidades. Van a estar a la altura de sus futuros deberes, si es que ahora se preparan adecuadamente con la ayuda de sus familias, la Iglesia y las instituciones educativas. Busquen su lugar en la Iglesia y en la sociedad, aceptando generosamente las tareas que ahora se les confieren dentro y fuera de la familia. Esa es la forma más adecuada de prepararse para las tareas que les esperarán mañana. Nunca olviden que todo estilo de vida que lleven que no esté en sintonía con las intenciones de Dios hacia los hombres, tarde o temprano está predestinado a fracasar. Porque el hombre únicamente en Dios y con Dios puede realizarse completamente y conseguir la plenitud que desea desde la profundidad de su corazón. Un poeta vuestro escribió: “Felix, qui sempre vitae bene computat usum”, es decir “Feliz es el que siempre piensa como utilizar bien su vida” (M. Marulić, Carmen de doctrina Domini nostri Iesu Christi pendentis in Cruce, v. 77). Un papel esencial lo tiene la elección de los verdaderos valores en lugar de los falsos; la elección de la verdad pura, y no de las medio-verdades o de las verdades falsas. No les crean a los que les prometen soluciones fáciles. Sin sacrificios no se puede construir nada grande“. Juan Pablo II se despidió de Solin con las siguientes palabras: “Se acerca la hora de despedirse. Este último saludo se los dedico a todos, en especial a ustedes, los ciudadanos de Solin: Estén orgullosos del tesoro de la fe que la historia les confió y cuídenlo con recelo. Quiero despedirme de ustedes recordándoles las palabras del beato Aloizije Stepinac: “No serán dignos del nombre de sus padres, si permiten que alguien los arrebate de la gruta en la que Cristo edificó su iglesia” (Testamento del año 1957). A todos los confiero a Ella, quien fue la Madre terrenal de la Palabra encarnada para nuestra salvación. Que la Virgen de la Isla desde su santuario en tierra croata vele por ustedes, sus familias, su patria. Que sea su apoyo en la tarea de atestiguar a Cristo en este nuevo milenio, que ya está en la puerta.
¡A todos los bendigo!
¡Benditos sean Jesús y María!”
